miércoles, marzo 21, 2007

elfino arte de odiar

Odio el teclado de esta computadora, loodio con toda mi alma, es quelamuy zorra decide ignorar mi orden de escribir con un espacio y mipereza es mayor para devolverme a escribir correctamente los espacios (solo espacios, no meimportan los acentos). EL dia de hoy, junto con la nubladez del cielo (cosa inusual en estos diasde sol quemante hasta el alma), he decidido escirbirporque odio a todos ya todo yporque todos merecen morir, porlo menos el dia de hoy. Empiezo con esteteclado, por no seguir mis órdenes, odio a Alfredo (apesar de que hace unratoledijeque noqueriaque se muriera, pero eso fue antes de su comentario) por decir que escribo comoDario y, obviamente, odio a Dario por existir y tener que copiarle.
Odio a Castellanos por existir y hacerme desperdiciar una hora demivida a diario (y sí me obliga a asistir a su clase, apesarde que yo seria masfeliz terminando de ver Smallville o haciendo cualquier otra cosa). Odio todos losque estan el en Centrode computoeneste momento por aparentar estar haciendo cosasinteresantes; odio la pagina del blogspot porhacerme desperdiciar minutos.
Odio que mi madre monopolice las depresionesen la casa y que me eche en cara la poca racionalidad que puedo tener en situaciones dramáticas, que meobligue a asistir a una cenafamiliar tratando de aparentar lo quenosomos, mientras se enfrascan en sus mundos de rencor y vanalidades, mientrasem preguntan sobre lointeresante demi dia yluego meignoran sin haber escuchado niunasolapalabra deloque les dije. Odio lacena familiar por obligarme estar en micasa, odio al mofoqueacaba de entrar al CC, al chiwipor apatico, al Torrreon por saludar al kike que está junto a mi e ignorarme despues. Odio a normita por haber perdido la razon aquel desafortunado dia de diciembre. Odio al kike por sugerirme no desperdiciar mitiempo con este post.
Odio a fecal por existir, odio a todos los hombrespor ser idiotas y unas zorras, odio a lasmujerespor serunas nenas mariconas y,pordemás,zorras. Odio no tener unabotella devino en este momento y odio que calcaneo se hayaido cuandofuimosabuscarlo. Odio elatun y losgatos.
Ciertamente noodio lospasteles peroodiono tenerunoen estemomento. Odio que mi papa estuviera conuna mujeryqueno dejara sus sentimientos enlacama, no odio quehaya decidido ser feliz perosi odio que lohiciera sinimportarle los demás.Odioquemi mama no quiera buscarla felicidad ensi misma y que mis hermanos satanicen todo,metiendose en un problema que no lescompete. Odio que el queso me haya decepcionado pero noodio haberlo decepcionado. Odiono sentir remordimientos deningunaclase ysobreningun tema,sientoquepodria matar a alguien ycontinuar tomando micafé. Odio micomputadora casi como odio esteteclado, odio la carne y laharina estosultimosdias. Odio lagentemolesta, a los parasitos de la escuela y a Castellanos por decirme que losoperadores eranunasmusarañas...
Enuna semana me baja y mihumor es el que acabo de escribir y termino diciendo loque deberia ser una filosofia de vida para muchas personas (para milo es):
"No necesito un hombre a mi lado, solo entre mispiernas de vez encuando"
Apesarde que algun hermano mio se escandalice. (no, no odioal alfrodito)
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