Casi al nivel Princesa, versión Doña Bohemia

Mirando a la vida a través del reflejo del cristal, fui testigo de como bajó de aquel auto y caminó hasta ponerse detrás de nosotros, erguida y con la mirada fría, con un toque de irracionalidad y locura que sólo crees haber visto en novelas... Era demasiado tarde...
Sin moverme de mi lugar murmuré "Voltea para atrás"... Él no se había dado cuenta y ciertamente su cara mostró un poco de sorpresa y, quizás, algo de pánico...

Hace años que no tenía vacaciones reales. En los últimos días he atendido a todos mis ocios y vicios:

• Visitas conyugales, fraternales y familiares, hasta fui al dichoso Tantra, aprovechando para incitar las perdiciones y los buenos momentos;
• Me he dedicado a leer los libros que tenía apilados sin terminar, bueno, apenas he desapilado a mi amado Feynman pero la lista acumulada de cuatro años es algo larga;
• He terminado algunos proyectos de moda mientras aprendo a coser a máquina (algo más difícil de lo que pensaba), ahora sólo espero la quincena para ir a buscar telas;
• He hecho labor en la cocina, algunas veces con resultados satisfactorios y otras tantas no;
• No he visto tanta televisión como pensé que vería pero ya empecé con la primera temporada de Dr. House, algunas películas y he continuado con el Smash (Melee);
  
• Últimamente he disfrutado de la música de Serrat&Sabina para complementar los ambientes y
  
• Hasta un cigarro me he fumado...

Todo esto bajo la inusual atmósfera que nos ha invadido estas semanas, atmósfera de ambiente calmadamente húmedo, cubierto de nubes sorpresivamente cargadas con agua para traernos una refrescante lluvia, significativamente bella, belleza que sólo alguien de Hermosillo puede disfrutar...

(Dice mi hermano que en el Mega (lugar de mucha gente del sur), los gerentes y otros trabajadores estaban espantados por la falta de clientela, por lo menos, la primera vez que llovió (y un poco sorprendidos por la reacción de la gente ante la precipitación de líquido))