Volviendo de Álamos

Tenía a mis ex-suegros favoritos a mis espaldas. Yo estaba sentada en un lugar privilegiado dado el frío y viento de esa noche. El espectáculo empezó con la presentación del grupo: Paté de Fuá. El vocalista habló y fue entonces cuando sentí una sensación recorrer todo mi cuerpo, una especie de calor y sonrojo que me puso chinita la piel... Malditos argentinos y su voz sexy!

Empezando los primeros de Febrero, días que me procupan por la costumbre que tiene el Universo de jugar conmigo por estas fechas. Y no se si haya sido por esa costumbre, agregando un pequeño error de identidades, pero la pobre de Pati se vio afectada: un ojo morado por un juguetón Nicolás (su xoloitzcuincle).

Por otro lado, siempre pensé que había tocado fondo cuando nos hospedamos en lugares como "Hotel Palacio" (que de palacio sólo tenía el nombre) o en ese que ni siquiera recuerdo el nombre, el de San Luis Potosí, que estaba bien horrible. Pero siempre podemos llegar más abajo, así fue como conocí el "Hotel Soria", el cual me sorprendía más conforme pasaban las horas. Lo peor fue el famoso y gratuito desayuno continental. Se trataba de un puesto abandonado fuera de la improvisada recepción, el cual trataba de unos contenedores con cereal, leche en tetrapak y desechables como para satisfacer a un bebé anoréxico... Fuera de eso, Álamos estuvo bien, pero de eso hablaré otro día...