27

Se que ha pasado mucho tiempo desde la última vez que escribí. Debo confesar algo al respecto: durante un tiempo muchas cosas parecían un tanto triviales después de junio.

Lo siguiente que supe fue lo que sucedió el primero de julio. Quise escribir toda esa indignación que sentía pero, nuevamente, no tuve fuerzas. Hasta pensaba escribir todo para que siempre que lo leyera vovlieran todos esos sentimientos porque, a mi ver, el día que deje de sentir todo eso que sentí en aquel momento será el día que deje de importarme este país, el día en el que me habré convertido en todo eso que camina siendo víctima y parte del sistema que no funciona. Aun así, no escribí nada.

Despúes llegó el momento de volver a ser maestra en preparatoria. Actividad que disfruté muchísimo. Adoré a mis nuevos niños y hasta disfruté de las historias recientes de los anteriores. Un buen semestre maestril. Ahora he sido invitada a continuar el próximo semestre aunque para eso aun falta un tanto.

También ese verano fue cuando decidí seguir con mi futuro. Empecé el doctorado, en ciencias, en física. Después de pasar los últimos años experimentando la realidad del mundo científico, tomé la decisión de estudiar en la Universidad de Sonora. Esta vez no salí de la ciudad y, aunque mucha gente tiene teorías sobre esta decisión, la verdad es esta: hay mucho que quiero vivir en este momento con la gente de esta ciudad, especialmente con Pati. Además, el programa que estoy estudiando es muy bueno y elegí al mejor asesor que he visto en mi recorrido. Sí, hablo de MAría Elena. Hasta ahorita ha sido un poco light y eso es mi culpa, a tal grado que esta semana han habido varias preguntas como "cuándo iniciarás tu doctorado?". Prometo estas vacaciones meterle galleta.

También este año compré mi primer bicicleta y aprendí a andar. Creo que es una de las cosas que sí me arrepiento no haber hecho antes. Amo mi bicicleta.

Además de algunas muchas situaciones, sucesos, vivencias, sentimientos y decisiones que he tomado en este tiempo, debo decir que todo ha estado bien. Obviamente he tenido estas altas y bajas que siempre me acompañan: kilos extras, problemas, enojos, depresiones, viajes y reencuentros.

Aun así, estoy ansiosa por empezar este nuevo año. Tengo 27 y pintan para ser muy buenos :)